¡No se puede dar lo que no se tiene!
Quien no puede ser feliz, no puede dar felicidad, quien
no está cómodo en la vida, no puede hacer que otros se
sientan bien. Por
eso hay personas que contagian su felicidad, así como personas que siempre
tienen quejas y dejan tras de si un largo rastro de amargura.
No se puede dar lo que no se tiene.
¡No se puede dar
lo que no se tiene!
Cuando se piensa en esta frase, de inmediato pensamos en las
cosas materiales que cada cual posee, pero esta reflexión no va de eso, es de
aquellas personas que viven siempre en forma triste y maldiciendo su "mala
suerte", porque según ellos todo les sale mal. Personas que siempre desean
cosas que no están a su alcance, cosas que otros tienen. Personas que cuando
algo tienen no saben apreciarlo y sólo
piensan que debieran tener más. Todo sería
diferente si esas personas pensaran por unos minutos que la felicidad y el gozo
que se puede obtener en la vida, nos las brindan las cosas sencillas, cosas que
siempre están a nuestro alcance, cómo un
amanecer, disfrutar de mirar una
flor, de ver reír a los niños o simplemente agradecer
lo que la vida no ha dado. Esas clases de
personas, por más que les muestres estas cosas no sentirán nada, no tendrán
alegría, y no lograrás hacerles sonreír con aquellas cosas que tú disfrutas.
Puedes disfrutar de esas cosas porque
estás llena de amor, de ilusiones, de esperanza, te sientes contenta por dentro
y eso es hace que seas una persona completa. -Si
tienes amor en tu corazón, puedes dar amor- Y
eso sí que es valioso. Hay quien pensará
que si una persona es feliz, es que no tiene problemas. Pero no es así, claro
que tiene problemas, sólo que sabe sobrellevarlos y aunque muchas veces el
dolor golpee fuerte en su corazón, por ser una persona llena y plena nada logra
anular su felicidad, ni su serenidad para ver la vida. Toma todo lo malo como
experiencias y sabe salir adelante aun y a pesar de estos problemas cotidianos
que la vida nos da cada día.
Lograr la felicidad interior sucede cuando todo tu ser está
en completa armonía con todo lo que eres o haces; y mientras más amor repartas
hacia el mundo, más grande se hace dentro de ti a modo que puedes repartirlo a
manos llenas. Eso te convierte en una persona bien encaminada, alguien que sabe
lo que quiere, que conoce sus metas y hacia hasta donde llegar. Ser así te
convierte en una de esas personas a las que todos se le acercan, pues son como un imán a la cual todo se le pega, lo
bueno y lo malo… Pero sabes salir airoso, pues te has construido firme y
sólido. Existe ese tipo de personas que no
pueden dar porque no tienen nada bueno en su corazón, son pobres de espíritu,
no hay alegrías ni amor dentro de ellas; es como un campo árido donde nunca se
podrá sembrar, son personas nocivas que viven el cada día amargándose y
deseando todo pero no queriendo dar nada. Desgraciadamente
hay muchas personas así en nuestras vidas, pueden ser personas cercanas o
lejanas, pero siempre hay alguien a quien le cabe como anillo al dedo esta
frase: "No se puede dar lo que no se tiene".
No tiene sentido esperar cosas buenas de este tipo de
personas, porque si no saben ser felices, ¿cómo podrían dar a otra persona
aquello de lo que carecen?
Por eso en la vida hay etapas que debemos ir quemando para
evitar caer en la amargura. Los que viven añorando un pasado, los que sienten
que todo el mundo les debe algo, que no es justo que otros sean felices porque
ellos no lo son ni lo serán, esos son seres insatisfechos con todo, con la
vida, con Dios y con todo el mundo. Es
triste, pero lo mejor es alejar personas así de nuestras vidas, pues de lo
contrario, al final terminamos muy mal porque empezamos a ver lo que ellos ven:
todo en blanco y negro. - Hay que alejarse- La
vida es alegría, es amor, es dar a manos llenas los talentos que poseemos. Dar
amor es un acto que nos hará una mejor persona, única, irrepetible, porque
podremos decir "yo sí puedo dar lo que tengo, que no es poco: Me sobra
amor, me sobra felicidad. Soy alguien que lucha aun contra la corriente pero
derramo felicidad a mi paso". Quienes
renuncian a las maravillas de la vida y saborear la felicidad de dar amor a
otros se pierden en el camino de la tristeza... Por eso tú siempre sonríe, vive la vida y cuando veas que
quienes te rodean te dan muestras de amor y afecto, tu corazón se llenará de
gozo. Eres feliz. Puedes darlo todo…